domingo, 12 de diciembre de 2010

Fundamentos de FD: Regla de la Reciprocidad.

En fotografía, una de las herramientas más básicas y fundamentales que aprendemos es el hecho de comprender y usar la "Ley o Regla de la Reciprocidad", que relaciona la cantidad de luz que entra en el plano focal y la cantidad de tiempo, que arroja como resultado la exposición relativa.

Exposición relativa = Cantidad de luz (f) * Tiempo de exposición (en seg.)

Esta ley de la reciprocidad, en cierta manera, deriva del concepto desarrollado por los químicos Robert Bunsen y Henry Enfield Roscoe en lo que en física y química se conoce como la "Ley de Bunsen-Roscoe" y que establece que el producto de la intensidad de la radiación (en nuestro campo la cantidad de luz que llega al sensor) por el tiempo de aplicación (el tiempo de exposición), es constante. Se refiere a la importancia de un mínimo de intensidad para obtener los efectos, y que esta intensidad está en relación inversamente proporcional con el tiempo de aplicación para obtener la misma densidad de energía y por consiguiente, los mismos efectos.

Por tanto, hay que entender que, si disminuimos la cantidad de luz (intensidad de radiación lumínica en la fórmula) deberemos aunmentar de manera proporcional el tiempo de exposición (o tiempo de aplicación), y viceversa; para conseguir la misma exposición relativa.

A modo de ejemplo y conociendo ya lo que es un "paso de f" (si no vid.) voy a plantear un supuesto práctico. Considerando que la sensibilidad del sensor (la ISO, vaya) es constante y que las condiciones lumínicas son exactamente iguales en la realización de una toma, al ajustar los parámetros de diafragma y velocidad de exposición decidimos colocarlos a f5,6 y 1/60 seg., dándonos esto una toma cuya exposición relativa es correcta. Si variáramos uno de estos dos parámetros, para arrojar el mismo resultado deberíamos variar necesariamente el otro. Así pues, si cerráramos el diafragma hasta un f8, necesariamente deberíamos exponer durante más tiempo la película ¿Cuánto? Lo mismo de manera proporcional. Como de f5,6 a f8 hay un paso, dejamos pasar la mitad de intensidad de luz y, por tanto, deberemos exponer el doble de tiempo (1/30 seg) la toma para poder obtener los mismos resultados.

El mismo ejemplo, expresado en manera de esquema:

(EV=0)=f5,6*1/60
|
(EV=-1)=f8*1/60
|
(EV=0)=f8*1/30


EV=valor de exposición

sábado, 11 de diciembre de 2010

Fundamentos de FD: La velocidad de obturación: El barrido.

Hoy, por primera vez en lo que llevo de blog, me permito hablar de la primera técnica. Es una técnica que exige cierto conocimiento de la cámara y un poco de destreza. La técnica en cuestión fue "inventada", por llamarlo de alguna manera, por Jacques-Henri Lartigue; un pintor y fotógrafo francés de mediados del siglo XX. Éste descubrió éste singular efecto usando una máquina fotográfica de placas y sujetándola a mano, lo que lo hace, bastante más difícil, por cierto.

La técnica del barrido da como resultado una imagen con una potente sensación de dinamismo, en ésta imagen, veremos al sujeto que debería estar moviéndose perfectamente enfocado y el fondo distorsionado de una manera muy peculiar (lo que le da el nombre a la ténica).


"Grand Prix de Circuit de la Seine"
Uno de los primeros barridos de Lartigue.

Existen dos clases de barridos, en función de hacia donde dirija el movimiento. El primero de ellos es el más común, el barrido horizontal o barrido a secas; mientras que el otro es conocido como barrido vertical o basculamiento, mucho más infrecuente.

Para la realización de ésta técnica emplearemos en primer lugar y si tenemos posibilidad una focal larga, a partir de 70mm, ya que esto nos mantendrá alejados del motivo suficiente como que éste se encuentre lo más paralelo a nosotros durante toda la toma. También porque las focales largas tienen una profundidad de campo menor, difuminando así los fondos y, por tanto, éstos quedarán bastante menos agresivos en nuestra toma. Pero ésto no es necesario, sólo es un consejo.

Después, escogeremos una velocidad de obturación lo suficientemente lenta como para que, en una toma normal, los objetos en movimiento no queden congelados; pero a la vez suficientemente rápida como para que no la trepidemos con la cámara en la mano. Esto puede sonar contradictorio con la técnica, pero al aplicarla hay que tener en cuenta que invertiremos los sujetos estáticos y dinámicos de la imagen. ¿Qué velocidades son tan lentas y a la vez tan rápidas? Las que oscilan alrededor de 1/60 seg. en función de la distancia focal y de la velocidad del objeto, por eso muchas veces tendremos que hacer pruebas.

Así pues, una vez ajustado el tiempo de exposición que queremos y elegida la focal que usaremos para disparar, sólo nos queda ajustar el fotómetro por el diafragma.

A partir de aquí, encuadraremos el objeto que esté en movimiento y lo "anclaremos" en una posición siguiéndolo con la cámara mientras éste se mueve y disparando cuando nos convenza la toma. Continuaremos apuntando al sujeto que estamos fotografiando mientras se ejecuta la toma y un poco después, lo que evitará trepidaciones en otro sentido que no sea el pretendido.

Para éste tipo de fotografías es recomendable el uso de trípode, ya que nos ayuda a mantener un plano uniforme. Aunque no son para éste cometido (si no para fotografía de paisajes), pero también se pueden usar para este tipo de fotografías los cabezales para trípode de doble bloqueo independiente.


Rótula Benro HD-38 3D